Por culpa de una sola canción, Traigo de todo siempre ha corrido el riesgo de ser disecado por un taxidermista para, una vez congelado a temperatura ambiente, ponerlo en un altar, adorarlo y que vengan los diletantes a sacarle brillo al fenómeno todos los días. Así, fascinados.
De hecho, me arriesgaría a preguntar, ¿este álbum seguiría siendo el más importante de la trayectoria de Ismael Rivera si no incluyese El nazareno? Aunque también se podría porfiar: sin Las caras lindas, ¿Esto sí es lo mío sería el segundo mejor álbum de él (algunos se atreven incluso a decir que es superior)?
Es para quedarse pegado con el temita hasta el año 2014, por lo menos...
El Sonero Mayor (Fernando Sánchez) |
Para bien y para mal.
Traigo de todo fue producido por Joe Cain y grabado en Generation Sound Studios (uno de los estudios preferidos por los músicos de jazz de Nueva York, como atestiguan numerosos discos de esa década). Los arreglos, como siempre, estuvieron a cargo del pianista cubano, el ex matancero Javier Vázquez. Los Cachimbos estuvieron más aceitados que nunca y contaron en esa ocasión con un invitado de la talla de Alfredo chocolate Armenteros en la trompeta, además de Manuel González en el saxo alto, Harry D'Aguilar en el trombón, Raimundo Vázquez en el bajo, Víctor González en el bongó, Carlos rigo Malcon en los timbales, Frankie Malabé en el congo y Sammy Ayala en la percusión. Los coros, muy sobresalientes -en Satélite son, sencillamente, insuperables- estuvieron a cargo de Yayo El Indio, Vitín Avilés y Adalberto Santiago.
Maelo dio rienda suelta a su tumbao en este largo LP y, además de hacerle honores a ese Cristo Negro de Portobelo del que hablaré más abajo, arrojó impunemente temazos de la talla de Qué te pasa a ti, con un soneo nítido, apretado, un arreglo de trompeta y trombón bien entrelazado; el saxo de González soltando un breve solo. O Witinila, canto a esos pobres negros de las plantaciones antillanas del siglo XVIII, esclavos por oficio y esclavos de una religión que no era la suya. O El niche, en la que se burla amargamente del racismo y los complejos sociales que él, café con leche, habrá sentido cuando se es rechazado tanto por las blanquitas como las negritas. O Satélite, un lento son montuno que es delicioso y agudo en la crítica hacia la artificialidad y el desdén que ha habido (y hay) en la relación entre Puerto Rico y Estados Unidos (satélite llamando a control, no responde). O Colobó, una bomba sabrosa que hace un homenaje a Loíza, el primer pueblo fundado por esclavos en Borinquén (algunas biografías, incluso, aseguran que allí fue donde nació Maelo). O Yo no quiero piedras en mi camino, una canción con varias lecturas, tanto a nivel personal como profesional. Extráiganlas ustedes.
Pero es Traigo de todo la que resume el canto de Maelo, sonero mayor, cantor de cantantes y dejémonos ya de epítetos
Yo sí que traigo de todo
Soy el mago de la copla
Caserita no te vayas a dormir
¿Oíste, Belén? ¿Oíste, Belén?
Caserita no te vayas a dormir.
Porque al son que me tocan bailo
lo que yo quiero es prender el vacilón
lo mismo canto un guapango, una conga
una guaracha y un rumbón.
Mira, yo pongo a bailar a un cojo
Lo vacilo con la clave y el compás
El montuno se lo canto yo a mi antojo
Se lo pongo como a usted le guste más.
Yo lo estiro, yo lo encojo
Yo lo pongo como a usted más
Ya te lo dije, traigo de todo
Volvamos al principio del pugilato. En un post anterior dije que uno de los factores que hacían de Ismael un buen vendedor de discos era que los producía él mismo, así que los ejecutivos de la disquera no tenían forma de meterles mano; Traigo de todo es un ejemplo claro de esto. Ejemplo por contraste, además: al año siguiente, Fania Records compraba Tico-Alegre Records y, en la transacción, estaba incluido también el contrato artístico de Maelo. El cambio de régimen comenzó a sentirse: la mano larga de Masucci soltó exigencias y estas se notaron en el resto de la producción discográfica (sobre todo en Soy Feliz, paradójico título para un disco que está hoy destacalogado, por malazo).
Por otro lado, y si se fijan en el bolero Lágrimas puras, notarán que ya en 1974 no llegaba con solturas a ciertas notas. De hecho, tal y como ya resultó evidente dos o tres discos después, la voz de Ismael estaba en franca decadencia, debido a unos pólipos que se le fueron desarrollando en las cuerdas vocales. Como si le cortaran, poco a poco y de forma irreversible, las alas a un pájaro.
Este es uno de los dos motivos por los cuales creo que Traigo de todo es el mejor disco de Rivera: Esto sí es lo mío tiene temas generosos, dos o tres imprescindibles, y Maelo muestra su maña en el canto y la da a conocer, pero le falta voz, la orquesta se lo va comiendo y, aunque gente como César Miguel Rondón digan que ya a estas alturas no le hacía falta para cantar con esa sabiduría, la voz es la voz y la ausencia se nota. ¿Que pudieron haberle operado a tiempo el problema y haberle devuelto la tesitura? Sí, seguro que sí. Pero no se intentó sino en 1985, cuando ya Maelo había pasado por el terrible trance de enterrar a su hermano del alma Rafael Cortijo, había hecho caso omiso de la promesa al Cristo Negro y había sido de nuevo engullido por el marasmo de las drogas.
No era ni la sombra de sí mismo. La decadencia.
No era ni la sombra de sí mismo. La decadencia.
El otro motivo -para no caernos a cuentos- es, por supuesto, El Nazareno, un éxito de grandes proporciones con un solo de timbales de rigo, otro breve solitario de trompeta de chocolate que es una maravilla y un voceo de Maelo que todo el mundo se debería saber de memoria. La canción describe la sensación que sintió el cantante cuando fue a participar, poco después de salir de prisión en 1966, en una procesión en el pueblo de Portobelo. En ella cargó al cristo y, palabras suyas, cuando yo vi a ese señor que me miraba bien fijo, como si me conociera, yo sentí algo bien raro, como si me estuvieran sacudiendo por dentro. Y no sé, cambié, a mi manera, pero cambié. Y no me interesa si la gente me cree o no, pero a uno, a veces, le pasan estas cosas en la vida.
Para los que gustan de rankings, esta canción está sin duda en el Top Ten general de la salsa. O dicho de otra manera: si tú vas a comprar un recopilatorio de lo mejor de la expresión salsera y no está incluida esta canción, te están estafando miserablemente.
La onda expansiva causada por El nazareno no conoce fronteras. Es tan apreciada que Maelo llegó a ser recibido en Panamá con honores de jefe de Estado: los militares panameños (remember Omar Torrijos) iban al aeropuerto a recogerlo para llevarlo a cenas de gala; la gente besaba el suelo que él antes pisaba (cosa que lo apuraba mucho: yo no soy un santo; soy un artista, decía). Su biógrafa y amiga Aurora Flores acudió una vez con él a la peregrinación del 21 de octubre de 1978, y le vio cargar la cruz a cuestas, y le vio llevarla al ritmo de los tambores. Y le oyó decir que gracias a esa peregrinación su fuerza interna renacía para seguir adelante con su vida. El mensaje final del tema, si se fijan bien, no es más que un canto a la amistad (y al buenrollismo, dirían en España) y el reconocimiento de que su fuerte adicción a las drogas no solo le había hecho daño a él, como pensaba y decía: su entorno personal resultó también afectado.
Será cierto o no el sacudimiento, la canción está allí y muestra a un Maelo en pleno dominio de sus facultades, ofreciendo su mejor producción discográfica y demostrando que cuando hay libertad creativa la cosa fluye como es debido.
¿Se han dado cuenta? La orquesta está al revés en El nazareno y al derecho en el resto del disco... ¿...o es de la otra forma?
Lo cierto es que el piano suena siempre en el lado izquierdo, menos en ese tema. Punto negativo para Tony May y Gretchen Zoeckler, que fueron los distraídos ingenieros de sonido (tanto jazz, tanto jazz y luego meten la pata en algo tan evidente como es el equilibrio del estéreo).
Si piensan que estoy meando fuera del perol y Traigo de todo no es el mejor disco de Maelo, debajo está el espacio para los comentarios.
Denme plomo.
Denme plomo.
Saludos Xoan, muy buena crónica. Bien chévere. la copie y la guarde. Ahora que vamos a sacar nuevamente la revista, con tu permiso, en algún momento la utilizaremos, con tu crédito, lógico
ResponderBorrar¿Quién no ha "echado un pie" con El Nazareno? Todo un clásico de nuestra música caribeña. Recuerdo una vez en Cuzco, en una cena con unos amigos, de repente comenzó a sonar el tema. No olvidaré a los peruanos tratando de ajustar sus caderas a un ritmo que casi les era desconocido.
ResponderBorrarDefinitivamente "El Maelo", Ismael Rivera, con o sin sus cachimbos, seguirá siendo El Sonero Mayor.
Una vez más, excelente crónica y creo que Ismael Rivera se merece otra más. Un abrazo y estamos pendientes
@Angel: muchas gracias por tus comentarios. No olvides poner mi nombre completo, que el Xoan es el mote para el blog solamente, jeje.
ResponderBorrar@Mario: Vendrán más discos de Maelo, por supuesto! Solo, con Kako y con Cortijo. Ahora es que queda blog :)
Excelente como siempre..
ResponderBorrarUna de mis favoritas de Maelo es "Las Caras lindas" me gusta por la sencillez de su letra y por supuesto el son que se deja colar.
Un abrazo y te sigo aunque muchas veces en silencio..
Un beso.
excelente entrada valio la pena esperar,sin duda, en mi humilde opinion el mejor LP de Maelo, y cuidado sino de la salsa derrocha son,sabor,melao,y ese calor tropical que solo los grandes saben transmitir,Xoan te metistes en un problema no se como vas a hacer para superar esta entrada
ResponderBorrar@primis: sé que sigues esta locura. y lo agradezco. ;)
ResponderBorrar@angel: si no supero este, igual habrá valido la pena escribirlo. :)
Xoan,claro que vale la pena,si no,por que crees,que esperamos tus nuevas entradas,con tanta ansiedad,somos adictos a tu blog,llevamos la salsa en la sangre.Gracias panal
ResponderBorrarMAELO MI GRAN AMIGO DE LA CALLE CALMA WOW KE RECUERDOS ME LLEGAN A LA MEMORIA COMO ESTE GRAN SER HUMANO Y SONERO NO HABRA JAMAS. POR ALGO EL BARBARO DEL RITMO EL SE~OR BENY MORE LO BAUTIZO COMO EL SONERO MAYOR Y NO SE EKIVOKO EN DARLE ESE TITULO. KE VIVA ISMAEL(MAELO)RIVERA MI GRAN AMIGO
ResponderBorrarEstimado, me estás obligando a desempolvar los discos de Maelo. Y hasta ahora, por lo escuchado, "Esto fue lo que trajo el barco" no tiene nada que envidiarle a este "Traigo de todo". Los temas "Dime por qué" (que es casi la historia de mi vida sentimental y que me hace llorar cuando es acariciada por la voz de Maelo, porque aquí el no canta, te acaricia), y "El incomprendido" pagan el disco.
ResponderBorrarSaludos
Víctor Paredes
Lima-Perú
PIENSO QUE MAELO PUBLICO TRES BUENOS DISCOS ENTRE 1972 Y 1974 ESTO FUE LO QUE TRAJO EL BARCO, VENGO POR LA MACETA Y TRAIGO DE TODOS PARA LUEGO REJUVENECER CON DE TODAS MANERAS ROSAS. UNA OBSERVACION SI TE FIJAS EL DISCO SOY FELIZ YA ESTABA EDITADO ANTES DE LA COMPRA DE LA FANIA AL SELLO TICO RECORDS. DE HECHO LA PORTADA DEL LP QUE YO POSEO TIENE UNA CALCOMANIA ENCIMA DEL SELLO ORIGINAL DE LA PORTADA QUE ERA DE TICO PARA REEMPLAZARLA POR LA DE VAYA RECORDS. SALUDOS DESDE PANAMA DE IVAN DIEZ Q.
ResponderBorrarJuan Ignacio...de verdad que siempre das en el punto con tus blogs. Yo viví esa epoca gloriosa de Maelo y de verdad que me la gocé a millon, aquí en Puerto Rico, donde Maelo era un Dios. Sus presentaciones en bailes se llenaban siempre y el hombre era muy humilde con su publico. No ha habido ni habrá otro Sonero como Maelo " El Sonero Mayor ".. Suerte con tus futuros blogs.
ResponderBorrarEn que anno se publico el video clip de Colobó? Aquien sabe
ResponderBorrarAlguien sabe si la portada tiene algún significado?
ResponderBorrarporque no creo que lo hayan hecho así porque sí y ya.